Viaje a Bulgaria

Ocho días y siete noches. Eso es lo que un grupo de amigos de la AEPT y la AEDH hemos estado disfrutando en Bulgaria recorriendo, aparte de Sofía, otras ciudades de esta república.

Un recorrido interesante y lleno de destinos de gran interés histórico y cultural como Plovdiv, Rila, Borovetz, Bankia, Boyana, Bachkovo, etc. Con un programa diario de visitas y excursiones que dejaron poco tiempo para el descanso.

Nos alojamos en el Hotel Marinela de Sofia como base de operaciones para ir y volver todos los días a los destinos indicados y en donde  todas las noches se realizaban las cenas del grupo en privado y comentábamos las opiniones de cada uno del viaje a la vez que departíamos en conversaciones muy agradables entre amigos.

Bulgaria es un país emergente en actual transición de su política anterior a una Europa comunitaria en la que todavía se denotan grandes carencias y cuidado de los detalles en lo que a turismo se refiere. Algo que los profesionales de este medio nos dimos cuenta enseguida, pero que las maravillas que en él se encuentran suplen con creces todos los inconvenientes.

El comentario general de todos, al inicio del viaje, era que Bulgaria es una gran desconocida, quizás por esos todos íbamos un tanto expectantes en lo que nos podríamos encontrar. Es por esto que nos sorprendió gratamente el nivel de comidas, alojamientos y otros servicios como las instalaciones que el Complejo de Vinos y SPA turismo “Starosel” cuenta en la ciudad del mismo nombre. Un lugar magnífico para pasar unos días de descanso, aprovechar sus aguas termales calientes y visitar una bodega de vinos búlgaros con posibilidad de hacer una cata de vinos.

Nuestra guía nos hizo un magnífico relato de la historia del país, sus monumentos y museos así como las diferencias entre un pasado unido a la antigua Unión Soviética y el presente en desarrollo de capitalismo expresado en adjetivos que todos recordaremos por mucho tiempo.

Disfrutamos de días muy agradables en lo que a la climatología se refiere y aunque la primera noche y los dos primeros días nos acogió con nevadas, éstas tuvieron un encanto especial pues dieron una ambientación muy adecuada para lo que estábamos visitando; para finalizar, la última noche tuvimos una copiosa nevada, lo que nos despedimos de Bulgaria con un entorno especial al teñir de blanco sus paisajes, como para recordarnos que estamos próximos a la Navidad.

En definitiva, una opción de viaje muy recomendable para aquellos que quieren incorporar a su lista de países visitados, uno más y muy distinto al resto.

Hemos confeccionado un álbum de fotos del viaje con las imágenes que hemos podido reunir. Por motivos de privacidad, el álbum está situado en la zona privada